lunes, febrero 26, 2007

La hora del alarido.

Es el momento del grito...

Sentimientos ahogados en el aire, emergen del déposito interior sonando a trueno en la noche, clamando por victorias y derrotas.

Y después...

Nada.

Todos lo escucharon, despertaron sobresaltados, mas en su inconsciencia siguen durmiendo, esperando otra hora, aguardando otro gito que los haga levantar.

Si tiembla la tierra y no acuden... ¿no serán más faciles unos susurros, que con la misma energía movilicen a todos?

domingo, febrero 18, 2007

Maños haciendo el sueco en Växjö

Mañana llegan los turistas.

De hecho ahora mismo problablemente estén terminado de empaquetar sus maletas, y en un par de horas o tres cogerán un bus camino a Barcelona.

El esquema de su viaje es otra odisea parecida a la última que yo viví en mis propias carnes, pero ellos tienen una ventaja, son cuatro.

Los señores Ignacio Antonio, Javier, Jesús y Eduardo, caminan a mi encuentro, esta es una visita sin programa, la verdad es que alguno quería organizar algo, pero como simpre siendo fiel a mi, ya se darán las cosas por si mismas.

Puesto que no lo voy a vivir y esta gente es probable que a estas horas ya no lo lea antes de su llegada, me he propuesto ironizar un poquito con la aventura que les viene encima.


Para empezar, el autobus nocturno de la una de la madrugada Zaragoza-Barcelona, estos viajes de tres o cuatro horas no suelen dar mucho juego, pero bueno, la cuestión es que yo apuesto que con la excitación de la expedición recien iniciada, ninguno va a poder cerrar un ojo y probablemente tampoco ninguno de los desdichados pasajeros que tengan alrededor.
Lo malo empezará cuando los saquen del autobus en Barcelona a las cinco de la madrugada, ¿qué hacer un lunes a las cinco de la mañana en Barna? La primera respuesta va a ser... "Tios vamonos al aeropuerto y allí pasamos el rato".

Zumbido de respuesta incorrecta en un quizz show... ¿¿No os habiais enterado de que el primer tren al aeropuerto sale a las siete de la madrugada??

Opciones:

a) Dormimos un par de horas en la estación.

b) Una partidita de cartas.

c) Vamos a las vias a mirar como pasan los trenes.


Van a dudar entre b) y c), pero creo que si alguno ha recordado meter en la bolsa una baraja, será b).

Así aguantarán jugando al guiñote o al mus, yo diría que guiñote, hasta las seis y media de la mañana, entonces se empezarán a preguntar donde se sacan los billetes de tren para el aeropuerto. Descubrirán esas expendedoras automáticas de pasjes de tren cuyo idioma por defecto como no podría ser de otra forma es el catalán, tardarán como cinco minutos en comprarlos, y cargados con sus pesadas maletas, ellos piensan que por estas latitudes hace un frío del carajo y mamá les llenó la bolsa de ropa de abrigo como para ir a una guerra, enfilarán las vias de tren.
El trayecto al aeropuerto es como de veinte o veinticinco minutos y no deberían de tener muchos problemas en llegar bien.

Ahora tenemos a cuatro turistas en el aeropuerto del Prat a las siete y media de la mañana, empezando a pensar la razon por la cual en vez de en el bus de la una no salieron en el de las cuatro y además muertos de sueño...
¡Vamos a facturar las maletas!, soltará alguno y caminarán alegres al check in. Allí la suerte empieza a jugar de nuevo, si no tienen suerte el empleado de turno, todavía dormido, les espetará: "El vuelo aún no está abierto, siguiente...", pero si tienen una pizca de fortuna la respuesta será de este estilo: "Lo siento chicos, el vuelo aún no está abierto, no puede tardar mucho, volved en cosa de media hora, gracias. Siguiente..."

Así las cosas ellos se maldecirán en cualquier caso por su mala fortuna y querrán asesinar al amigo que compró los billetes de autobus tres horas antes de lo que debería de haber sido, a la vez, empezarán a experimentar los efectos de una noche sin dormir y buscarán cualquier lugar en donde les puedan servir un café cargadito y algo crujiente para desayunar de paso. Jugarán inconscientemente a aparentar ser el más entero y menos cansado-somnoliento de todos y así conseguirán mantener la compostura un rato más.

Pasadas las ocho se desharán de sus maletas, esperando que solo sea temporalmente, pasarán los controles de la policía y se dirigirán a su puerta de embarque emocionados, no todos los dias se coge un avión, solo que aun tendrán casi dos horas de espera en la teminal, puede que ahora a alguno le derrote el sueño, pero el resto jugarán otro rato a las cartas, si las tienen, y así aguantarán hasta la hora del embarque.
La excitación irá en aumento y seguramene alguien se acordará de sacar su cámara de fotos y empezará a fotografiar todo lo que se mueva al estilo compulsivo japones, así consumirán la última media hora antes de meterse de lleno en la aeronave.

Ellos confian en dormir durante el viaje, pero quedarán tan impresionados por la esbelta belleza de las azafatas que seguro que uno o dos de estos individuos no podrá apartar sus ojos de ellas. No prestarán atención a la pelicula y pasadas tres horas aterrizarán en Arlanda, pero claro, ahora será la una y cuarto, y el vuelo de enlace no saldrá hasta las cinco...y esta vez no quiero pensar en que la fortuna les sea adversa, no quiero ni pensar en que tengan algún retraso en el siguiente viaje.
La cuestión es que en Estocolmo, recogerán de nuevo su equipaje para volverlo a facturar... si, Sverige is different. Y de nuevo tendrán el mismo problema que en Barcelona, pero ahora todo es en inglés y eso va a complicar las cosas un poquito. Buscarán algo de comer y seguramente encontrarán un 7eleven y sus salchicas, en esto gastarán un rato pero hasta las cinco se van a aburrir como ostras. Se les va a hacer tan largo que sería aburrido hasta contarlo, así que lo voy a dejar...

Si el vuelo no se retrasa y embarcan bien, se asustarán de que a las cinco pasadas está ya oscureciendo y del avión de hélices que les tiene que traer hasta acá, ahora el vuelo será más corto´, el cansancio mayor y las azafatas menos guapas, así que esta vez dormiran todos. Llegarán a Växjo sobre las seis y yo les estaré esperando en la plaza de la universidad.

Ese será el fín de su odisea, si están muy cansados lo mismo ni se dan cuenta de lo peor, aquí ya no queda nieve.

martes, febrero 13, 2007

Algún retoque

He decidido pone un poco de musica en el blog, me parece un recurso, excusa, últimamente no se me vienen muchas cosas a la cabeza y no tengo muchas ganas de escribir...

Es una canción bonita de dos cantantes de mi tierra, y habla de mirar hacia delante cuando las cosas están mal, espero que os guste.

Saluditos

domingo, febrero 11, 2007

Resaca...

Mañana de invitación y paseo, por fín pude bajar a tocar su ventana, además esta vez fué con su consentimiento, ayer por la mañana no había ni una sola nube en el cielo, todo lo que se veia era blanco, y el frío apretaba pero se podia aguantar. Salimos envalentonados, con dirección probablemente a ninguna parte, tanto es así que acabamos caminando sobre el hielo del lago helado. De sorpresa me encontré la cara llena de nieve, pensé ¡traición!, esto si que no me lo esperaba, pero solo estaba su risa, la nieve y el hielo bajo mis pies.
Al poco retomamos la marcha ya sobre tierra firme, dijiste que la nieve te recordaba a la playa, te conteste que pronto te llevaría a una y sonreiste, paseamos nos acercamos a los patos, que parecían inmunes al frío, asi seguimos poniendo paso tras paso, me decías lo peligroso que era coger un pato, no sabía que atacaban a los ojos decía yo con cara incredula, me hablabas del tamaño de los padrillos y de lo dificil que es separar a las madres de los hijos, ¡Estos dias solo pasean parejitas! exclamabas y yo buscaba como loco entre los paseantes encontrar excepciones, intentando vencer esas ganas enormes de besarte, pero no podía. Y así sin más nos plantamos en la cudad, sin mucha esperanza te comente que igual estaba pasando algo interesante, callejeamos y recordé aquella tarde en la que tenías tantas ganas de comerte un Big Mac, te propuse ir al Mac Donald´s pero esta vez preferías el Kebab. Acordamos regresar, teniamos otra larga caminata de vuelta a casa, esta vez el sol bañaba nuestras caras y por primera vez en mucho tiempo sentí que calentaba mis mejillas, nos cruzabamos con más parejas, muchas paseaban perrillos de los que tu quedabas prendada casi al momento, sentía algo cercano a la perfección, la foto de esos momentos no podía ser mejor. Y entonces algo te asustó, y como instintivamente me besaste, la justificación no fué otra un tímido "me asuste" y yo solo dije "ojala te asustaras más a menudo", con esa sensación llegamos al restaurante. Muy bueno, acabamos hartos de comida, nos despedimos pero acordamos vernos un rato después para cebar un mate. Cuando apareciste dijiste que tenías prisa, y yo me alegré de que gastaras unos minutos más a mi lado, mateamos y nos pusimos a ver videos de Gran Hermano, a ninguno nos gusta y reimos mucho, el tiempo voló y tu tenías que marchar, pero ni tu querías irte ni yo quería que te fueras de mi lado, no podía dejarte escapar, pero al final marchaste y ví como te alejabas de mi lado otra vez más, entonces es cuando empecé a contar los segundos que me quedaban para volver a verte.

Horas despúes ya acostado, volví a pasear a tu lado.

lunes, febrero 05, 2007

Contrastes

No debe de ser muy distinto, como cuando volviste a la vida después de sentirte acabado, esa vez que te sacaron del agua y tus pulmones ya no funcionaban, cuando llegó la primera sonrisa, la que creías que ya no volvería.
Debe de ser lo mismo, la vida es así, hoy estás moribundo y mañana estás en la cresta de la ola, no tendría que ser, pero las cosas vienen como vienen y no hay nadie que pueda cambiarlo.

Siempre me dijeron que era un pasota y que no había nada que me hiciera mover un dedo, últimamente escucho que me tomo las cosas demasiado en serio.
No se si soy yo el que ha cambiado o que quizás encontré una razón, ¿vivo desorientado o por una vez estoy en el camino correcto?, dificil de decir, supongo que son cuestiones que solo el tiempo se encarga de responder.

Es bonito vivir en la duda, pero también desconcertante, todos estos altibajos, los rios que brotan de tus ojos, quien pudo llorar de tristeza y en unos minutos estar llorando de felicidad. Igual solo soy un loco, y en el fondo alguna de las cosas que me estan pasando en un país extraño y tan lejos de todas las referencias anteriores, solo han encendido la mecha de mi demencia.

Qizás lo único cierto es que no hay nada, solo estoy viviendo un sueño, uno de esos sueños de los que uno no quiere despertar, o al revés, esa puede ser la razón por la que me cuesta tanto conciliar el sueño. Lo cierto es que mi realidad ahora mismo me parece tan apasinante que dormir es perder el tiempo.